LA OTRA DIMENSIÓN
PAQUI VICIANO
Vivimos en la época de la irrealidad política. Desde hace un año, el Ayuntamiento de Dénia se ha sumido en una dimensión paralela dirigida por un gobierno fantasma que ha usurpado el proyecto político refrendado por las urnas en las elecciones municipales de 2007. No se trata de un nuevo gobierno, no hay nuevo programa, ni acciones nuevas. En la otra dimensión se reproduce punto por punto el programa electoral y de gobierno del PSPV-PSOE; eso sí, previamente desvirtuado en la cháchara inconsistente del pentapartito –un gobierno ectoplasmático- y posteriormente parasitado de manera subrepticia pero poco hábilmente disimulada. En la otra dimensión, presume la alcaldesa, también tienen un teatro, “La Nau”,mucho más grande, más alto, más caro que el del gobierno progresista formado por el PSOE y el Bloc que planeaban edificar en el Bosc de Diana, sin ningún gasto para las arcas municipales y asociado a la construcción de un centro comercial en Torrecremada; proyecto cuya legalidad ya ha sido sentenciada por los tribunales. La Dénia de la otra dimensión tendrá un segundo Centro de Salud, pero en la Pedrera –para que la Generalidat se ahorre un edificio de nueva planta-, bien lejos del solar céntrico que PSOE y Bloc adquirieron para ceder a la Conselleria y dar el impulso definitivo a una infraestructura tan necesaria. Asimismo, la alcaldesa virtual, directora de una orquesta que cada vez suena más desafinada, inauguró el Centro de Barrio del Oeste dando continuidad –y eso le lo agradecemos muy sinceramente- a una propuesta socialista exitosa que empezó a materializarse con los locales de las Roques y la calle Sertorio. Repite ahora, Ana Kringe, que ella también “quiere el tren” y empieza una campaña de recogida de firmas que contará, ya lo avanzamos, con las rúbricas socialistas, para que las gestiones que ahora se afana a realizar la alcaldesa hurtaron muchas horas de la agenda política del PSOE. Finalmente, anuncia triunfal, desde la otra dimensión, que la Conselleria le ha prometido, ¡a ella!, la construcción de una residencia para enfermos psíquicos en los terrenos que, por un capricho de los dirigentes autonómicos, nunca acogieron la ampliación del hospital comarcal de la Pedrera. Y reanuda, nuevamente, pero en una ubicación diferente, un proyecto socialista que la moción de censura del 7 de julio de 2008 paralizó. El “desgobierno” de esa otra dimensión aún no ha descubierto su secreto mejor guardado: un programa propio nacido de las necesidades de la Dénia que decidieron “salvar” del lío socialista. De momento, juegan a imitar al equipo precedente mientras aprenden a gobernar. O, simplemente, mientras acaban de trazar las líneas del nuevo Plan General de la ciudad...
Vivimos en la época de la irrealidad política. Desde hace un año, el Ayuntamiento de Dénia se ha sumido en una dimensión paralela dirigida por un gobierno fantasma que ha usurpado el proyecto político refrendado por las urnas en las elecciones municipales de 2007. No se trata de un nuevo gobierno, no hay nuevo programa, ni acciones nuevas. En la otra dimensión se reproduce punto por punto el programa electoral y de gobierno del PSPV-PSOE; eso sí, previamente desvirtuado en la cháchara inconsistente del pentapartito –un gobierno ectoplasmático- y posteriormente parasitado de manera subrepticia pero poco hábilmente disimulada. En la otra dimensión, presume la alcaldesa, también tienen un teatro, “La Nau”,mucho más grande, más alto, más caro que el del gobierno progresista formado por el PSOE y el Bloc que planeaban edificar en el Bosc de Diana, sin ningún gasto para las arcas municipales y asociado a la construcción de un centro comercial en Torrecremada; proyecto cuya legalidad ya ha sido sentenciada por los tribunales. La Dénia de la otra dimensión tendrá un segundo Centro de Salud, pero en la Pedrera –para que la Generalidat se ahorre un edificio de nueva planta-, bien lejos del solar céntrico que PSOE y Bloc adquirieron para ceder a la Conselleria y dar el impulso definitivo a una infraestructura tan necesaria. Asimismo, la alcaldesa virtual, directora de una orquesta que cada vez suena más desafinada, inauguró el Centro de Barrio del Oeste dando continuidad –y eso le lo agradecemos muy sinceramente- a una propuesta socialista exitosa que empezó a materializarse con los locales de las Roques y la calle Sertorio. Repite ahora, Ana Kringe, que ella también “quiere el tren” y empieza una campaña de recogida de firmas que contará, ya lo avanzamos, con las rúbricas socialistas, para que las gestiones que ahora se afana a realizar la alcaldesa hurtaron muchas horas de la agenda política del PSOE. Finalmente, anuncia triunfal, desde la otra dimensión, que la Conselleria le ha prometido, ¡a ella!, la construcción de una residencia para enfermos psíquicos en los terrenos que, por un capricho de los dirigentes autonómicos, nunca acogieron la ampliación del hospital comarcal de la Pedrera. Y reanuda, nuevamente, pero en una ubicación diferente, un proyecto socialista que la moción de censura del 7 de julio de 2008 paralizó. El “desgobierno” de esa otra dimensión aún no ha descubierto su secreto mejor guardado: un programa propio nacido de las necesidades de la Dénia que decidieron “salvar” del lío socialista. De momento, juegan a imitar al equipo precedente mientras aprenden a gobernar. O, simplemente, mientras acaban de trazar las líneas del nuevo Plan General de la ciudad...
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