CARTA DE PAQUI VICIANO A LA CIUDADANÍA DE DÉNIA
POR EL "CONSENSO" PREVIO
¿Qué queréis los ciudadanos y ciudadanas de Dénia? ¿Qué es aquello que os gusta de vuestra ciudad? ¿Y qué pensáis que debe cambiar? En las últimas semanas, los partidos políticos hemos entablado un debate en torno al modelo de desarrollo urbanístico futuro, en ocasiones demasiado virulento y ajeno a los intereses reales de nuestros conciudadanos, en el que no se os ha dado voz y mucho menos voto. A propósito de la exposición pública del concierto previo -documento base para la elaboración de un nuevo Plan General- hemos hablado, más unos que otros, ya que el gobierno ha adoptado una actitud sospechosamente discreta en este tema, de la necesidad de dotar a la ciudad de más espacios verdes; de apostar por las viviendas de protección pública y descartar de una vez, valientemente, la construcción desmesurada; de las carencias en el ámbito educativo y sanitario; de proteger zonas de gran valor paisajístico y medioamiental, como son Les Rotes y la desembocadura del Riu Racons, al final de Les Marines.El documento que ha presentado el pentapartito, sin embargo, no participa en absoluto de estas preocupaciones. Por el contrario, el concierto previo -redactado sin las garantías que ofrece la fiscalización de la oposición y prescindiendo por completo de la consulta ciudadana- resucita los fantasmas de los tantos planes desarrollistas que durante años han condenado a Dénia a una autodegradación programada. A pesar de los intentos por desviar la atención, minimizar la contestación ciudadana y aprobar el plan entre cortinas de humo, son centenares las alegaciones que ha recibido y cada vez más las voces que se oponen radicalmente a que se recuperen proyectos una y otra vez enterrados por los propios ciudadanos: la urbanización de Les Rotes, la construcción de un centro comercial en la cantera del Castillo, la explotación hasta las últimas consecuencias de Les Marines, la reconversión de las pocas zonas agrícolas que nos quedan en moles de hormigón...No obstante, cada pueblo ha de ser dueño y responsable de sus propias decisiones. Y el futuro de Dénia debe dejarse en las manos de sus ciudadanos. El gobierno que yo presidí durante 5 años, apoyado mayoritariamente por la ciudadanía en dos elecciones sucesivas, abrió los cauces de participación necesarios para dar forma a un Plan General definitivo, en el que se materializasen exactamente los deseos de los dianenses. Bien es cierto que milito en un partido de izquierdas y que creo firmemente en el principio de sostenibilidad como base del planeamiento urbanístico futuro; es decir, mi apuesta por una Dénia en la que se limite la construcción, a cambio de aumentar el suelo dotacional y las zonas verdes, es vocacional. Pero igualmente son muy firmes mis valores democráticos y sé que como alcaldesa o concejala me debo a mis ciudadanos y cualquiera de mis decisiones ha de ajustarse a sus intereses.Este principio de responsabilidad política es el que parece haber olvidado el pentapartito, de cuya ética, por otro lado, comenzamos a dudar desde el momento en que PP, GD, PSD y CU tomaron la alcaldía con la ayuda de un tránsfuga. Y ahora, de nuevo, haciendo caso omiso de la voluntad popular, estos cuatro partidos y el concejal Juan Collado se disponen a decidir unilateralmente cuál ha de ser el futuro de nuestra ciudad. Desde estas líneas, invito a los ciudadanos y ciudadanas de Dénia a que hagáis oír vuestra voz. A iniciar entre todos una campaña por el "consenso" previo. Quiero conocer vuestras opiniones, el modelo de futuro por el que apostáis y qué os preocupa realmente. Sólo con vuestra colaboración podremos articular un vehículo real y efectivo de participación y plasmar los resultados en el futuro Plan General.Enviadme vuestras propuestas a la dirección de correo electrónico porelconsensoprevio@gmail.com. Cada semana daré cuenta a través de la prensa de las sugerencias e ideas que reciba, con vuestros nombres y apellidos, si me autorizáis a ello. Creo que éste es un buen modo de que todos y todas hagamos firme y público nuestro compromiso con el futuro de Dénia y una manera de combatir el oscurantismo impuesto por el pentapartito en este tema. Nos estamos jugando mucho y tenemos derecho a decidir.
¿Qué queréis los ciudadanos y ciudadanas de Dénia? ¿Qué es aquello que os gusta de vuestra ciudad? ¿Y qué pensáis que debe cambiar? En las últimas semanas, los partidos políticos hemos entablado un debate en torno al modelo de desarrollo urbanístico futuro, en ocasiones demasiado virulento y ajeno a los intereses reales de nuestros conciudadanos, en el que no se os ha dado voz y mucho menos voto. A propósito de la exposición pública del concierto previo -documento base para la elaboración de un nuevo Plan General- hemos hablado, más unos que otros, ya que el gobierno ha adoptado una actitud sospechosamente discreta en este tema, de la necesidad de dotar a la ciudad de más espacios verdes; de apostar por las viviendas de protección pública y descartar de una vez, valientemente, la construcción desmesurada; de las carencias en el ámbito educativo y sanitario; de proteger zonas de gran valor paisajístico y medioamiental, como son Les Rotes y la desembocadura del Riu Racons, al final de Les Marines.El documento que ha presentado el pentapartito, sin embargo, no participa en absoluto de estas preocupaciones. Por el contrario, el concierto previo -redactado sin las garantías que ofrece la fiscalización de la oposición y prescindiendo por completo de la consulta ciudadana- resucita los fantasmas de los tantos planes desarrollistas que durante años han condenado a Dénia a una autodegradación programada. A pesar de los intentos por desviar la atención, minimizar la contestación ciudadana y aprobar el plan entre cortinas de humo, son centenares las alegaciones que ha recibido y cada vez más las voces que se oponen radicalmente a que se recuperen proyectos una y otra vez enterrados por los propios ciudadanos: la urbanización de Les Rotes, la construcción de un centro comercial en la cantera del Castillo, la explotación hasta las últimas consecuencias de Les Marines, la reconversión de las pocas zonas agrícolas que nos quedan en moles de hormigón...No obstante, cada pueblo ha de ser dueño y responsable de sus propias decisiones. Y el futuro de Dénia debe dejarse en las manos de sus ciudadanos. El gobierno que yo presidí durante 5 años, apoyado mayoritariamente por la ciudadanía en dos elecciones sucesivas, abrió los cauces de participación necesarios para dar forma a un Plan General definitivo, en el que se materializasen exactamente los deseos de los dianenses. Bien es cierto que milito en un partido de izquierdas y que creo firmemente en el principio de sostenibilidad como base del planeamiento urbanístico futuro; es decir, mi apuesta por una Dénia en la que se limite la construcción, a cambio de aumentar el suelo dotacional y las zonas verdes, es vocacional. Pero igualmente son muy firmes mis valores democráticos y sé que como alcaldesa o concejala me debo a mis ciudadanos y cualquiera de mis decisiones ha de ajustarse a sus intereses.Este principio de responsabilidad política es el que parece haber olvidado el pentapartito, de cuya ética, por otro lado, comenzamos a dudar desde el momento en que PP, GD, PSD y CU tomaron la alcaldía con la ayuda de un tránsfuga. Y ahora, de nuevo, haciendo caso omiso de la voluntad popular, estos cuatro partidos y el concejal Juan Collado se disponen a decidir unilateralmente cuál ha de ser el futuro de nuestra ciudad. Desde estas líneas, invito a los ciudadanos y ciudadanas de Dénia a que hagáis oír vuestra voz. A iniciar entre todos una campaña por el "consenso" previo. Quiero conocer vuestras opiniones, el modelo de futuro por el que apostáis y qué os preocupa realmente. Sólo con vuestra colaboración podremos articular un vehículo real y efectivo de participación y plasmar los resultados en el futuro Plan General.Enviadme vuestras propuestas a la dirección de correo electrónico porelconsensoprevio@gmail.com. Cada semana daré cuenta a través de la prensa de las sugerencias e ideas que reciba, con vuestros nombres y apellidos, si me autorizáis a ello. Creo que éste es un buen modo de que todos y todas hagamos firme y público nuestro compromiso con el futuro de Dénia y una manera de combatir el oscurantismo impuesto por el pentapartito en este tema. Nos estamos jugando mucho y tenemos derecho a decidir.
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